Solemos celebrar la Navidad con grandes comidas que pueden llevarnos a cometer un exceso tras otro. Sin embargo, cuando ya se han manifestado algunas enfermedades esto puede descompensarlas y poner en riesgo la salud. Así pues, lo más importante es comer con moderación y no olvidar la actividad física.
Como siempre, la clave está en la moderación ya que abusar de la comida, del alcohol y sazonar las comidas excesivamente está fuera de lugar cuando hablamos de comer de forma saludable.
Por que no debes pasarte con las comidas en Navidad?.
Los excesos no se limitan a los días de fiesta, sino que comienzan antes de la Navidad y se alargan durante todas las fiestas. Esto supone un aumento en las calorías, la grasa y el alcohol que ingerimos y que se traslada, muchas veces irremediablemente, en un aumento de peso. Sin embargo, también puede producir un aumento de la glucosa, de la presión arterial y del colesterol y los triglicéridos. Estas transgresiones pueden producir más problemas si ya tenemos una enfermedad de base.
Especial cuidado deben observar, como no podría ser de otra manera, aquellas personas con enfermedades como la diabetes, si se experimenta una obstrucción intestinal o aquellas que han sido sometidas a una cirugía bariátrica (reducción de estómago). Y en el caso de padecer alguna enfermedad digestiva, desde la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) aconsejan actuar con prudencia y respetar las recomendaciones alimenticias indicadas el resto del año.
Que debes hacer.
Aprovechando las fiestas, desde la FEAD nos dejan un decálogo para cuidar la salud digestiva de cara a la Navidad y a las reuniones familiares:
- Evita las comidas copiosas, come despacio y mastica bien.
- Respeta, en la medida de lo posible, los horarios de las comidas.
- Si en el menú hay un plato más consistente, intenta tomar algo ligero antes, como verduras, ensaladas, sopas o mariscos cocidos.
- Modera el consumo del alcohol ahora y el resto del año.
- Incluye opciones con fruta en los entrantes, en la sobremesa y en el postre.
- Consume dulces con moderación.
- No sólo son importantes los alimentos sino su preparación y elaboración, por eso es mejor elegir técnicas a la plancha, al horno, al vapor o en wok.
- Sustituye las salsas industriales por vinagretas, limón y hierbas aromáticas.
- Si padeces alguna enfermedad digestiva, procura ser prudente y respeta las recomendaciones alimenticias indicadas durante el resto del año.
Encuentra un buen equilibrio entre los distintos alimentos y complétalo con hábitos saludables que eviten el sedentarismo. Se aconseja practicar al menos 30 minutos diarios de ejercicio físico.
Fuentes: